16.8.05

Casi me muero y no fue gracioso

¿Quién dijo que la pereza no mata?, ¿o al revez era?
Resulta que estuve a un pelo de morirme ahogado con un jugo multifrutal: estaba yo leyendo acostado cuando la sed empezó a desgarrar mis entrañas... como sabía que esa situación se podía llegar a dar, me había llevado una botella con jugo para saciar la posible falta de líquido.
Dado que estaba muy cansado, o pachorriento, traté de hacer el menor esfuerzo posible y beber de la botella en posición horizontal...
Cuando estaba por lograr mi objetivo, la implacable gravedad hizo que el líquido saliese expulsado de la botella para ser introducido con violencia por mis fosas nasales....

ahjjjjjjjjjuhhhhhhhhhhhhaaaaaaahhhhhhhhhuiiiiiiiiiiiijassssssddddddddddd

treita segundos de frenético revuelque (es decir, yo revolcandome sin poder respirar bien, y el jugo revolcandose por las sábanas) me bastaron para ver la historia de mi vida, mis logros, mis fracasos, mis puntos pendientes...

Y es así que me decidí a abandonar de una vez por todas la pereza... por eso me levanté y raudo fui al super a comprarme un vasito con bombilla, así podía tomar agua echado mientras leo...

Ouch, creo que al final no abandoné la pereza, pero a quién le importa...

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